19 agosto 2005

La industria discográfica protesta por la venta masiva de tonos para móviles.

Un emergente modelo de negocio en el que la industria discográfica quiere su pedazo de la tarta.
En España se descargan alrededor de 350.000 melodías al mes en un negocio que mueve unos 3.500 millones de euros en el mundo.
Este fenómeno ha provocado que la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) y la Asociación de Empresas de Servicios a Móviles (Aesam) hayan firmado un acuerdo por el cual cada vez que alguien se descarga una melodía para el móvil, los propietarios de los derechos de autor de la obra reciban su correspondiente pago.
Empresas como Movilisto o Myalert se han especializado en este servicio, un negocio que algunas discográficas consideran "alegal" ya que creen que estas empresas se aprovechan de los esfuerzos realizados por las discográficas.
Algunas discográficas piensan que la popularidad que lleva a convertir en un ring-tono a una canción especifica viene determinada, en la mayoría de casos, por la promoción que la discográfica da a esa canción, y sin embargo, no reciben ningún benéficio extra por las descargas realizadas a móviles.
Las empresas dedicadas a la comercialización de estos tonos alegan a este respecto que no deben pagar nada a las discográficas, ya que la canción que ellos ofrecen en las descargas es de menor calidad sonora e incluso a veces esta cantada por otros artistas.